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| El Turull del 2004 con el megáfono y el de 2007 con sotana |
Entre una foto y otra va un abismo, y demuestra algo que los que conocen al Rvdo. Turull afirman con toda rotundidad, y es su capacidad para el chaqueterismo, siempre que ello pueda reportarle algún bien para su futuro eclesiástico, en un carrerismo descarado, con la voluntad de escalar puestos de mando, aunque en alguna ocasión tenga que contradecirse a si mismo, o hacer un poco el ridiculo.
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| Roma 2007: Turull con sotana |
Tres años después en 2007 Turull va a Roma con motivo del cardenalato de Sistach, y cree que allí debe jugar sus cartas pero en sentido contrario, si quiere aspirar a la mitra, que tanto ansiaba. Es consciente de que su otra foto está en su expediente y que Germinans ya ha empezado a hacerle daño en sus objetivos vendiéndolo como "progresista". Turull piensa aquello de "un clavo saca otro clavo" y lo convierte en "una foto saca otra foto". ¿Como puede ser progresista un rector de Seminario que va con sotana y que obliga a sus seminaristas a hacer lo mismo?. Eran los tiempos de S.S. el Papa Benedicto XVI y es evidente que al pontífice alemán una foto así le llenaría de ternura.
Pero en Roma no cayeron en la trampa y el expediente de Turull siguió bloqueado a pesar de sus fallidas intentonas de maquillar su imagen y los intentos desesperados de su jefe, entonces ya cardenal por hacer que se abriera su expediente, pensando ingenuamente que por haber recibido la birreta roja le iban a hacer más caso que anteriormente.
Además Turull sufrió otro golpe que fue el recelo del clero nacional-progresista, que al ver las fotos de las sotanas, quedó defraudado y decepcionado, y dejó de ser un mirlo blanco para pasar a ser una especie de traidor, aunque la pax sistaquiana les obligaba a no criticarlo públicamente, por dentro estaban muy disgustados con él. De hecho si esto lo hubiera hecho alguno de sus antecesores en el cargo de rector de Seminario, la campaña de acosos y derribo contra él por parte del nacional-progresismo hubiera sido terrible.
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| Roma 2017: Turull con clerygman y americana gris y los seminaristas con trraje y corbata |
Ese es Turull, el hombre de los mil cambios de chaqueta, en cada momento y según sus intereses y cálculos viste de una manera o de otra. Y todavía nos queda mucho por ver. De entrada me juego un guisante (como diría el maestro Puyal), que el día que deje de ser rector del Seminario, arrinconará todos sus clerygmans en el armario y volverá a vestir de paisano, pero no los tirará, no fuera caso que las cosas cambiaran y tuviera que volverse a vestir sacerdotalmente de nuevo.
Antoninus Pius